By Aknida
aknida.blogspot.com
Existe la
posibilidad de que la gente no se suicide, sino que un buen día la tan temida y
trillada parca se les presente y los obligue a saltar de la azotea de algún
edificio emblemático, a lanzarse contra un tren en movimiento, o a atiborrarse de
ansiolíticos y bajarse un Jack Daniels Etiqueta Negra bebiendo del pico. Puede
que incluso a veces, la gente sea obligada a escribir falsos motivos de
suicidio para evitar pericias, o exagerar motivos reales de pesadumbre a los que
no les alcanzara para ser causa de tamaño efecto.
Algunos dicen que ante la presencia de tal belleza como la de La
Dama Negra, uno pierde su voluntad y es
imposible negarse a sus pedidos ni escapar. Tal imposibilidad quita
credibilidad a dicha afirmación.
Hay gente que consigue evadirla al menos un tiempo más, ya sea por voluntad
propia como apuntándole a algún toldo en plena caída libre o intentando no pegarle
al tren con órganos vitales, o por voluntad ajena como un amigo llegando y
haciéndonos un lavado de estómago revitalizador. Eso se llama intento de suicidio.
El intento es el de la parca.